Recorriendo Lima

Antes de venir a este país sabía solo algunas cosas puntuales, (yo creía que sabía mucho hasta que llegue) sabía un poco de su historia, sobre algunos monumentos y su exquisita gastronomía, pero solo al llegar fue que aprendí de la mejor manera que existe, viviendo la experiencia. Debo decir que es una ciudad que no me flechó a primera vista pero de la cual me fui enamorando poco a poco hasta el punto de sentir que he vivido aquí casi toda mi vida.

Una ciudad con tantos contrastes como Farmacias, Casinos, Bancos y Hostales (los que conocen Lima, sabrán porque lo digo), además una ciudad de casi 10 millones de personas más los extranjeros que hemos estado llegando, alberga por supuesto, muchísimos secretos, anécdotas y cosas maravillosas como sorprendentes.

Mi experiencia es un poco diferente a la de la mayoría de mis compatriotas, pues yo siempre quise conocer otras culturas y soy como una niña, me sorprendo por cada pequeña cosa que conozco y por eso estoy tan maravillada con este lugar caótico a orillas del océano pacifico.

Esta vez hablaré solo en términos generales porque solo un post no me alcanza para contar toda mi experiencia en esta enorme ciudad. Pues, aun trato de aprender los nombres de cada uno de los distritos, las rutas, por donde sale el sol (cuando sale) a entender algunas jergas y sobretodo, acostumbrarme al invierno.

Si bien vengo de un lugar totalmente distinto a este, para mí el cambio no ha sido muy brusco, siempre he entendido que si no te adaptas no sobrevives y esa es la esencia. Al tomar la decisión de irme tuve mucho miedo, pero en el fondo estaba tranquila porque sé que me puedo adaptar a los cambios fácilmente y siempre tuve el sueño de conocer otros lugares y obviamente sabía las consecuencias que tenía que asumir.

Usualmente veo a muchos compatriotas sufriendo y en estado casi depresivo, lo cual es preocupante, siempre trato de escucharlos y entenderlos, hasta aconsejarlos, pero es algo que a mí no me ha pasado, he aceptado este viaje como un aprendizaje, algo que tenía que vivir para valorar las cosas importantes, una nueva experiencia, un nuevo comienzo en un lugar donde casi nadie te conoce, donde puedes ser tú mismo.

Este post es tanto para ayudar a los que aún no se adaptan como para enaltecer las maravillas de esta ciudad tan peculiar, pues aunque no tengo mucho tiempo aquí me he dedicado a conocer y apreciar sus atractivos. Sé que los inmigrantes no vinimos hasta acá para ser turistas, pero tampoco para ser esclavos o a sufrir. También sé que todos dejamos las cosas que más amábamos allá, pero tampoco podemos vivir con un pie aquí y otro allá. Hay que abrazar nuestra realidad, aceptarla, tomarla y simplemente sacarle el mayor provecho a la situación.

No crean que por pasar su día libre conociendo el lugar donde están en lugar de estar sufriendo, sus familiares y amigos en Venezuela van a molestarse, porque a pesar de que de cierta forma acá estamos mejor, ellos nos quieren ver felices por encima de todo y no sé si para todos es así, pero para mi gran parte de la felicidad radica en conocer lugares nuevos.

Mi invitación es para que traten de aceptar su situación y hacer lo posible para mejorarla, porque es el país que escogimos, porque el destino nos trajo aquí por alguna razón, porque es mejor adaptarse y sentirse como en casa a estar sufriendo y quejándose sin hacer nada. También para que conozcan cada fascinante lugar que Lima tiene para ofrecer, sus atractivos, monumentos, su naturaleza, su deliciosa (barata y exagerada) gastronomía, lo chévere de su gente y porque no, su clima algo desafiante.

Quizás muchos no estén de acuerdo con lo que digo pero es lo que a mí me ha funcionado para sentirme bien estando prácticamente sola y a kilómetros de distancia de mi ciudad tan pero tan diferente a esta. Y si puedo ayudar a alguien en su proceso de adaptación seria de las mejores cosas del mundo. (Tal vez y debí estudiar psicología o hacer un curso de coaching como los que están de moda) Lo cierto, es que yo he estado adaptándome bastante rápido y aceptando mi situación y haciendo todo lo posible por avanzar sin quejarme ni estancarme, y también para que sepan que aquí, tienen a alguien para algún consejo o solo para hablar o hasta ‘’irnos de tono’’ jajajaj.

Hasta la próxima cuando les cuente acerca de uno de mis lugares favoritos de Lima, hasta entonces sean felices, xoxo.